Falsas acusaciones de Juan Gavidia
Cuando se difundieron las graves imputaciones contra mi persona por parte de Juan Martín GAVIDIA BECERRA ex oficial de la policía, créanme yo también era uno de los sorprendidos, no sólo por el contenido falso de las acusaciones difundidas sin que existiera mayor preocupación en su comprobación y/o descarte por parte de algunos periodistas de un medio televisivo; sino porque no podía encontrar una explicación a tan perniciosa conducta de un inmerecido miembro de la PNP que delictivamente, tergiversando situaciones y creando malsanamente hechos inexistentes, denunciaba falsedades que han sido totalmente descartadas y esclarecidas en las conclusiones del Parte Nro. 083-2006-DIRCOCOR-DIVAPJ-DIVIN-E4 DEL 13MAY2006 formulado después de más de once meses, con participación de los funcionarios policiales especializados, el representante de la Procuraduría Pública y del Ministerio Público, actuados que de conformidad al articulo 62 del Código de Procedimientos Penales tienen valor de prueba; pero es el caso, de que para que pueda comprenderse el origen de tantas injurias provocadas por falsos testimonios de un perverso personaje-que no fueron advertidos por la prensa- cuya actitud contradictoria como puede desprenderse del contenido de los correos electrónicos y otros elementos de juicio que fueron proporcionados a la representante del Ministerio Público; así como otros elementos actuados por las mismas autoridades durante la investigación preliminar, se ha determinado -según lo informado por mi defensa-que en la fecha estaría vinculado al Crimen Organizado Nacional e Internacional que trafica droga; por lo que es menester, hacer algunas descripciones y precisiones que pueden ser comprobables porque se sustentan en la verdad:
1. Obviamente, yo no he nacido general ni tampoco Ministro de Estado, alcancé estas nominaciones, como les consta a mis jefes y colegas, como producto de una larga y reconocida trayectoria profesional de más de treinta y dos años de servicios reales y efectivos en la institución policial, con firmeza de propósito para combatir el delito no sólo el narcotráfico, sino también el terrorismo en la DIRCOTE con éxitos reconocidos a finales de la década del 80 incluso diseñando con otros colegas la estrategia y táctica antiterrorista que permitió posteriormente la captura de miembros de la cúpula de Sendero Luminoso; dado que a mi entender la única forma de poder ejercer con dignidad una función de lucha frontal contra el Crimen Organizado es hacerlo sin involucrarse en el delito y con eficiencia.